Esta colección es un encuentro romántico con las primeras nevadas del invierno. Los diamantes están meticulosamente engastados para reflejar un testimonio conmovedor del paso del tiempo, reflejado en el delicado movimiento de las borlas desmontables de los pendientes, así como en la forma del aro del anillo.
Estas piezas son prueba de la elegancia y nobleza de la joyería al brindar a quien las lleva infinitas posibilidades de estilo y convertirse en testigo y guardián del amor.
